Lo sabes.

Sabes que ya no tienes nada que ver con esa persona, sabes que ya no pertenece a ti, cuando al despertar esperas ansiosa ese "Buenos días pequeña" y nunca llega. Cuando sabes que habla con amigas tuyas y pasa de ti, como si nada. Como si para esa persona nada hubiera pasado y siguiera todo igual que antes. Sabes que la has perdido cuando baja la mirada al verte pasar y cuando ríe y grita con sus amistades. Cuando ya no le interesan ni tus fotos ni tus estados y no le importa la confianza que le diste, que ahora está perdida. Cuando eres un amigo más entre todos los de facebook y un lio más en su lista de chicas conseguidas. 
Cuando borra tus chats y cuando no le importa ofenderte con estados dedicados a otras, cosa que antes no era así. Cuando en un momento inesperado aparece el mensaje "Tenemos que hablar" en medio de la conversación, apareciendo de la nada. Cuando dudas de si todo lo que pasó fue real. Sabes que lo has perdido cuando echas de menos esas conversaciones y no vuelven, sabes que no volverán a ser como antes. Nada volverá a ser lo mismo. Y de repente, crees que debes pasar página, te lo recomiendan y te lo repiten millones de veces al día y llega un punto en el que te lo crees, crees que debes empezar un nuevo capítulo y dejar atrás el anterior, en el cual él era el protagonista principal. Pero PAM! de repente te das cuenta de que aun no lo has podido superar. De que aun ocupa gran parte de tu corazón y que ya nada es lo mismo que antes, ni lo será. Todo ha cambiado y ahora se te viene toda, toda y absolutamente toda la mierda encima y ese es el momento en el que odias tu vida, y preferirías que nada de esto hubiera pasado, o que ni siquiera aun hubiera terminado, pero nada se podrá arreglar. Nada es como antes y ahora todo es absolutamente mierda.